¿Cómo interpretar el triunfo y crecimiento del Pacto Histórico en el Caribe?

¿Cómo interpretar el triunfo y crecimiento del Pacto Histórico en el Caribe?

Atlántico, San Andrés y La Guajira fueron emblemáticos

Por Caribe Investigación

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El Caribe colombiano históricamente ha sido un territorio de lucha y resistencia. Y este domingo 29 de mayo los ocho departamentos votaron a favor de la propuesta del Pacto Histórico.

El Caribe fue arrasado por el paramilitarismo entre 1990 y 2000, el tejido social quedó casi exterminado, sus cuatro puntos cardinales son saqueados por proyectos extractivos y mineros con fuertes impactos ambientales y sociales.

Cinco de sus ocho departamentos encabezan la lista nacional de los ocho territorios donde más de la mitad de su población vive en condición de pobreza: Guajira con 67,4 % de su población vive en esta condición, Magdalena (61,1 %), Córdoba (58,6), Cesar (56 %) y Sucre (54,6 %).

No es objeto de este análisis detallar las condiciones de pobreza y exclusión general, de inseguridad y abandono del campo en el Caribe, pero sí conocer a grandes rasgos cuál es la realidad del territorio y porqué la mayoría de su población votó por Gustavo Petro y Francia Márquez este 29 de mayo.

La propuesta del Pacto Histórico sintoniza perfectamente con la realidad y los retos del Caribe: combate a la corrupción de los clanes políticos, transformación de las relaciones y modelo económico extractivista poniendo como centro la vida y el medio ambiente, garantizar el acceso mínimo al agua y promover la producción agrícola, la educación gratuita, entre otras propuestas-exigencias.

Los resultados

Vayamos al grano. El Pacto Histórico ganó en los ocho departamentos por amplia mayoría. Esto confirma lo que analizábamos con los resultados del 23 de marzo, los sectores alternativos ganaron terreno en la Costa Caribe. En la Cámara crecieron 391 % y en el Senado 159 % si se compara con los resultados electorales de 2018.

En relación con la primera vuelta electoral de 2018, Gustavo Petro creció más de diez puntos porcentuales en el Caribe. En detalle, los resultados son los siguientes.

DepartamentoVotos Petro Primera vuelta 2018Votos Petro Segunda vuelta 2022Incremento porcentual de la votación
Atlántico331.687 (38,52%)479.049 (54,75%)16,23 %
Bolívar242.378 (38,33%)359.593 (49,95%)11,62 %
Cesar141.502 (35,94%)190.420 (44,00%)8,06 %
Córdoba249.303 (42,28%)318.645 (51,91%)9,63 %
La Guajira85.149 (43,07%)113.489 (54,71%)11,64 %
Magdalena143.107 (38,23%)226.501 (49,45%)11,22 %
San Andrés2.361 (18.55 %)5.996 (40,31%)21,76 %
Sucre154.208 (44,23%)198.095 (54,52%)10,29 %

Los dos departamentos con mayor crecimiento -en términos porcentuales- fueron San Andrés y Atlántico con 22 y 16 puntos de aumento en la votación respectivamente. Le siguen Bolívar, César, La Guajira y Magdalena con 11 puntos en cada uno. Luego Sucre con 10 y Córdoba con 9 puntos.

Consideraciones finales

La Guajira merece especial mención ya que ha sido sometida a la barbarie, exclusión y el saqueo, con mafias electorales y clanes corruptos ligados al paramilitarismo y al narcotráfico, donde 67,4 % de su población pasa hambre literal. Todos los municipios del departamento votaron mayoritariamente por el Pacto Histórico.

A pesar de las dificultades logísticas y con una extensa área rural en más de la mitad de La Guajira, la gente “le ganó el pulso a las maquinarias y a la desinformación” como afirmó Ignacio Epinayu en su cuenta twitter. Y esto aplica para todo el Caribe donde el Pacto Histórico hizo un llamado permanente para votar a conciencia para derrotar la compra de votos, práctica patentada por los clanes regionales.

Puede que en el Caribe el clan político más golpeado por estos resultados sea el charismo por tres razones. Petro los derrotó en la primera vuelta de 2018 y lo volvió hacer el pasado 29 de mayo con 22 puntos porcentuales por encima de sus propios resultados de hace cuatro años; lo segundo es que Pacto Histórico logró zanjar las diferencias y pugnas internas de los distintos sectores aliados, expresadas en la pasada campaña al Congreso, lo que demuestra que la unidad es primero; el desprestigio del clan Char es más que evidente.

Los resultados de San Andrés, con 16 puntos porcentuales de crecimiento, es una combinación de los errores del Gobierno de Duque, el abandono histórico del Estado a esta población, y la conciencia de la gente de San Andrés al respaldar la propuesta del Pacto en el Caribe.

A pesar de los resultados electorales de marzo pasado, a favor del Centro Democrático en Magdalena (en el resto del Caribe cayó), la unidad entre Fuerza Ciudadana y Pacto Histórico posibilitó el triunfo de Petro con 49.45 %.

En general es una derrota electoral momentánea para los clanes políticos y el establecimiento. Como buenos traficantes de la política, los clanes políticos negociarán con el candidato del uribismo Rodolfo Hernández apoyo financiero y logístico a cambio prebendas, cooptación del Estado e impunidad, como lo han venido haciendo durante los últimos 30 años.

Por eso en la alocución del domingo Gustavo Petro afirmó que “la corrupción se combate arriesgando la vida porque es un régimen de corrupción lo que estamos enfrentando”.

Ciertamente el Pacto Histórico está confrontando un régimen mafioso que venera la muerte. Con convicción y a la vez agonía, hastiada de la pobreza la población del Caribe no solo rechazó a los clanes mafiosos sino también la violencia política y el reciente paro armado de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia o el paramilitarismo como política de Estado, como bien ha documentado el jesuita y defensor de derechos humanos Javier Giraldo Moreno.

El Caribe es un territorio de lucha y resistencia que ama la paz. Lo expresó en el plebiscito al Acuerdo de Paz (2016) cuando sus ocho departamentos votaron a favor del “Sí”. Y esta es otra de las razones para votar mayoritariamente por el Pacto Histórico, coalición de cambio que tiene como bandera profundizar los acuerdos, mejorar las condiciones de vida del Caribe y caminar por el sendero de la vida y la paz.

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