LAS AVES NO ALZAN VUELO

LAS AVES NO ALZAN VUELO

Por: Edwin Doria

Anoche tuve la oportunidad de observar una serie alemana que escenificaba una lluvia de pájaros que tapizaban el suelo de muertes emplumadas ocasionadas por radiación de una planta nuclear cercana.

Esa escena de ficción me hizo reflexionar sobre la relación milenaria entre  seres emplumados y  humanos. Esta relación relevante en el proceso evolutivo de la vida, entre personas y aves, a inspirado artistas de distintas épocas a elaborar obras de arte donde el ave es protagonista. La historia del arte, desde las pinturas rupestres plasmadas en Qelqasqa Qaqa (Perú) en la cueva del Tajo, provincia de Cádiz, (España) entre otras, pasando por el Azul poético de Rubén Darío, Juan Salvador Gaviota de Richard Bach, el Pájaro Picón Picón  de Elíseo Herrera, hasta nuestros días, son testimonio de estrecha relación amorosa, pero igualmente de estigmatización en desafortunada convivencia para los pájaros con humanos en el planeta. Para muchas mitologías y religiones, el pájaro ha sido un animal simbólico. Algunos, reverenciados o repudiados por motivos religiosos, supersticioso o por prejuicios. En algunas culturas existen aves consideradas de mal agüero. Es posible, entre una y otra cultura varíen las percepciones. Por ejemplo, los búhos  se asocian con mala suerte, brujería y muerte  en la cultura africana, pero relacionados con la sabiduría en la cultura occidental.

Las aves, cómo toda la naturaleza, son producto comercial en la economía humana. Carne y huevos son fuentes de alimento en muchos hogares. Las plumas comercializadas para rellenar almohadas, adornar sombreros, vestuarios. En la sociedad de consumo ninguna presa es desechable, el excremento de algunas aves costeras, conocido como guano, es comercializado para preparar fertilizantes y  explosivos.

Los humanos, reconocidos seres depredadores de la naturaleza para favorecer sistema de ganancia, sus actividades han contribuido a la extinción de mas de 150 especies y varios cientos de aves diversas amenazadas para desaparecer.

Importante recordar, el propósito de las aves es volar y estar con otros de su especie en hábitat natural. Por eso, desde niño tuve leve sospecha que algo no andaba bien con los emplumados en la región.

En la ciudad de libres, el grupo de amigos de la barriada infantil y adolescente se dividía en dos bandos con relación a los libertarios emplumados, unos dedicados a capturarlos de manera tramposa, utilizando como señuelo, otros pájaros en cautiverio que inocentemente con su canto se comunicaban con los de su misma especie, para atraerlos y, sin proponérselo, cayeran en la trampa elaborada por manos humanas. Otros, más «inteligentes», empleaban un pegante llamado peñique, colocado en lugar estratégico junto al alimento y al aterrizar, sus patitas quedaban pegadas y mas nunca levantarían el vuelo.

A pesar de ser condenados a cadena perpetua, sin conocerse delito cometido por seres emplumados de canto ancestral, ni jueces que hayan proferido un veredicto condenatorio,  mucho menos, sanción de ley que promulgue capturarlos, encarcelarlos, comercializarlos y condenarlos a vivir el resto de sus vidas encerrados en diminutas celdas portátiles  y exhibirlos como mascota en patios, terrazas, árboles: o venderlos al mejor postor, los pájaros resisten alegrando y deleitando vida con sonoros colores volátiles, transmitiendo conocimiento y cultura ancestral a nuevas generaciones para vivir en libertad.

Por otro lado, un segundo bando dedicado a darle muerte a pájaros por diversión. Con ondas, piedras y escopetas se armaban diariamente para asesinar de manera folclórica el símbolo  libertario emplumado.

Un día me propuse liberar los pájaros condenados a cadena perpetua por el solo hecho de ser amantes de libertad.

Conocí una bandola de aves fugitivas que vivían ocultas entre grandes arbustos para evadir la captura, ser condenadas o asesinadas por los humanos. Estos pájaros de extendidas alas, enorme pico y canto de lucha, estaban condenados a muerte desde antes de nacer, algo así como el pecado original. Pájaros silvestres considerados enemigos por humanos, dedicados de manera sistémica a liberar especies en cautiverio.

Con ayuda de nuevas amistades aladas inicie preparación de transformación en pájaro. Elaboré alas de libertad con negro plumaje para divisar desde las alturas a peligrosos carceleros humanos con cientos de pájaros enjaulados, exhibidos en patios y puertas de casas, calles, bulevar, almacenes, árboles. Liberar esos pájaros, será la misión de prueba, pronto sabrán de la hazaña.

Compartir